top of page

El Programa de Desarrollo Rural, un pilar fundamental para nuestros agricultores y ganaderos

El Programa de Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha es, como su propio nombre indica, es un documento en el que se recogen todas las acciones de forma programática que buscan el desarrollo rural de la comunidad castellanomanchega. Este programa se lleva a cabo por la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, cofinanciado por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (FEADER) y tiene una extensión de seis años. Este programa detecta las principales necesidades de desarrollo rural en la región mediante la elaboración de un DAFO. A partir de esas necesidades se crea la estrategia con el fin último de abordar y lograr los objetivos en las distintas áreas de la comunidad con la prioridad del desarrollo rural. Esto se pretende lograr a través de medidas y submedidas que recoge el documento para acabar con las necesidades que se han detectado y lograr los objetivos, vertebrando así al mundo rural manchego.


Alguna de esas medidas son la transferencia de conocimientos y actividades de información, servicios de asesoramiento, gestión y sustitución de explotaciones agrarias, regímenes de calidad de los productos agrícolas y alimenticios, inversión en activos físicos o desarrollo de explotaciones agrícolas y empresas. Todas estas medidas buscan incentivar el crecimiento de la economía castellanomanchega y luchar contra la desigualdad económica de la comunidad.

Terrenos de Castilla-La Mancha. Fuente: elaboración propia

España, en el programa europeo vigente 2014-2020, recibió un por parte de la Unión Europea, a través de los fondos FEADER, 8.290.000.000€ del importe total que destina la Unión Europea, que es de 95.338.000.000€. España es el segundo país más beneficiado por estos presupuestos después de Francia que percibe 9.909.000.000€. Por detrás queda Alemania que recibe 8.217.000.000€ o Italia, a pesar de contar con menos población. Esto supone que España recibe un 8,7% de los fondos totales distribuidos entre los distintos Estados miembros. De esos más de ocho mil millones de euros, el Estado se queda con 238.000.000€ para el Programa de Desarrollo Nacional. El resto, es decir 8.052.000.000€, se reparte entre las distintas comunidades autónomas. La distribución de este presupuesto se realiza usando indicadores económicos, medioambientales y territoriales relacionados con tres objetivos que tiene la política de desarrollo rural: aumentar la competitividad de la agricultura española, realizar una gestión sostenible y adecuada y una acción por el clima y un desarrollo territorial equilibrado, según el gobierno de España.


De estos fondos FEADER que recibió España, un total de 1.147.100.000€ fueron destinados a Castilla La Mancha para financiar el Programa de Desarrollo Rural 2014-2020, lo que equivale a un 14,2% del fondo. Esto hace que sea la segunda comunidad autónoma que más dinero recibe detrás de Andalucía. Esta cantidad de dinero supone un 75% del total de la financiación. Un 15%, es decir, 222.750.000€ proviene de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha y el 10% restante, 148.500.000€, lo financia el Ministerio de Agricultura. El dinero destinado al Programa de Desarrollo Rural 2014-2020 fue de 1.485.000.000 de euros.


Gracias a este programa se benefician todos los habitantes del medio rural manchego. Castilla-La Mancha es una comunidad autónoma muy rural y el programa tiene incidencia en ese medio, en los entornos rurales. Pero el programa no solo incide en la actividad agraria o agroalimentaria sino también incide a través de la diversificación de la actividad económica en municipios de pequeño tamaño mediante los grupos de desarrollo rural o Leaders. El Programa de Desarrollo Rural tiene un presupuesto muy importante de inversión directa en el medio rural manchego, que beneficia al conjunto de la sociedad, pero de una manera más directa, a 120.000 agricultores y ganaderos que solicitan en Castilla-La Mancha la Política Agraria Común o PAC al año. Gracias a este presupuesto, los agricultores pueden aumentar la calidad del producto así como su competitividad, tanto a nivel nacional como internacional y crear riqueza en la región, como confirma el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.


Las medidas que se han implantado durante el programa 2014-2020 buscan la introducción de jóvenes agricultores y ganaderos en la región, financiar a los agricultores y ganaderos, haciendo especial hincapié en la agricultura y ganadería ecológica, conservación del medio rural y mantenimiento de hábitats naturales o ayudar a los agricultores y ganaderos de zonas de montaña o con limitaciones geográficas entre otras medias.


El nuevo Programa de Desarrollo Rural 2021-2026 va a ser un programa destinado a luchar contra la crisis económica provocada por la crisis sanitaria del COVID-19, donde el consejero Fernando Martínez Arroyo espera más recursos públicos y unos presupuestos europeos los suficientemente dotados donde la PAC sea una política importante. De esta manera, desde el gobierno autonómico afirman que, teniendo recursos suficientes, es más fácil poner en prácticas las distintas medidas, incidiendo particularmente en la actividad económica de municipios de pequeño tamaño. Dentro de esta línea de ayuda a los pueblos pequeños, el gobierno ha aprobado destinar seis millones de euros entre los grupos de desarrollo rural para financiar las iniciativas relacionadas con la adaptación a la crisis sanitaria actual.

Terreno de Castilla-La Mancha. Fuente: elaboración propia

“En el próximo programa lógicamente vamos a intentar considerar las circunstancias excepcionales a la hora de distribución de fondos entre los grupos de desarrollo rural y en la financiación de proyectos que presenten los emprendedores en todos y cada uno de nuestros pueblos” afirma Francisco Martínez Arroyo en relación al programa 2021-2026. Sin embargo, este programa está supeditado a la financiación europea y a las negociaciones del presupuesto europeo plurianual, donde España puede perder ciertos ingresos económicos en relación con años anteriores. Desde la consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural insisten en la importancia de la política agraria común y reclaman una PAC fuerte para tener un FEADER, que depende directamente de esta última, fuerte y poder hacer programas de desarrollo rural bien financiadas, tanto para las Comunidades Autónomas como para las distintas regiones europeas. “Yo espero que al menos mantengamos el presupuesto actual para los próximos siete años y que no disminuya la financiación ni el porcentaje de financiación europeo, que en este caso es del 75%, que se mantenga al menos en este porcentaje” desea Martínez Arroyo.


Desde el gobierno se hace una valoración positiva del Programa de Desarrollo Rural 2014-2020, donde se ha comprometido la totalidad del presupuesto para llegar a la ciudadanía castellanomanchega y se ha conseguido un relevo generacional del campo con el impulso que se ha dado para incorporar a jóvenes en el sector, donde se han incorporado aproximadamente 2.660 chicos y chicas. Se ha experimentado una profesionalización del sector gracias a las ayudas a los agricultores y ganaderos. También se ha visto incrementada la interacción cooperativa, la inversión tecnológica y la innovación en el sector agroalimentario, gracias a las distintas inversiones de la industria agroalimentaria de la región y se ha reforzado la diversificación de la actividad económica en el medio rural.


Sin embargo, desde la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Castilla-La Mancha miran con preocupación el futuro, puesto que no se sabe cuándo se va a poner en marcha el nuevo Programa de Desarrollo Rural. Las comisiones, la aprobación del nuevo marco financiero y el nuevo modelo de la PAC que financia el PDR se está retrasando por el COVID-19, del que dependen ganaderos y agricultores, así como los grupos LEADER. Desde la UPA-CLM se reclama un presupuesto adecuado para conseguir la estabilidad, especialmente de las explotaciones familiares de agricultura y ganadería. Para ello, reclaman que los fondos FEADER reciban un mayor aporte económico sin que se vea repercutida la PAC. Desde esta unión se reclaman aún más facilidades para la incorporación de jóvenes al sector y la movilidad de tierra a estos, mayor asesoramiento, instrumentos para gestionar los riesgos y la crisis y apostar por un programa dirigido a mujeres rurales. Aparte, desde UPA-CLM se pide que el PDR 2021-2026 se priorice las explotaciones agrarias y ganaderas familiares, la explotación de titularidad compartida, se apueste por la profesionalización de agricult@s y gander@s y que se apoye el uso de las energías renovables.


Por otro lado, para Manuel Rodríguez de la Cruz, joven agricultor de una pequeña localidad ciudadrealeña, el Programa de Desarrollo Rural sirve para “ayudarnos a combatir los precios tan bajos por los que nos vemos obligados a vender nuestros productos, algunas veces incluso con pérdidas, y el aumento de los gastos que afrontamos para poder obtener nuestros productos de calidad que no tienen otros países”. También Manuel Rodríguez pide “que se piense aún más en los pequeños agricultores, puesto que no todos los agricultores son grandes terratenientes y muchos vivimos al día”.


El apoyo económico que aporta el FEADER, gracias a los fondos europeos, es beneficioso para agricultores, ganaderos y Leader, puesto que incentiva una actitud inversora de la población, mejora las infraestructuras y los procesos productivos. Esta ayuda sirve para aliviar la presión económica, favorecer el desarrollo social, económico y medioambiental de las zonas rurales. Todo esto es posible gracias al programa de desarrollo rural que es una herramienta imprescindible para poder desarrollar políticas de desarrollo rural en el territorio.

Kommentare


PARA MÁS INFORMACIÓN - ¡SUSCRÍBASE!

¡Gracias por suscribirse!

  • Instagram
  • Facebook
  • Twitter
  • Pinterest

© 2023 by Urban Farming Forum. Proudly created with Wix.com

bottom of page